Todos en algún momento hemos experimentado la sensación de agobio cuando nos encontramos en un lugar sucio y desordenado o bien todo lo contrario una sensación de paz en un espacio minimalista y decorado con colores suaves. La psicología puede jugar un rol importante en los ambientes diferentes que nos rodean, en buena manera conforman nuestros hogares.
La psicología en el diseño de interiores es una rama de la psicología ambiental que se ocupa de estudiar la relación entre los diferentes tipos de ambientes y cómo estos afectan a la conducta y el estado de ánimo de las personas que habitan en ellos. Su objetivo es crear efectos positivos y además, sacar el máximo partido a esa relación.
Cada lugar que visitamos, cada espacio que recorremos nos transmite algo, es decir, produce un efecto en nosotros. Y de eso, precisamente, se encarga la psicología en el diseño de interiores. En concreto de todo aquello relacionado con el color, la disposición de los muebles o la selección de unos objetos u otros.
¿Cómo pueden influirnos los espacios a nivel psicológico? ¿Qué sensaciones pueden despertar en nosotros los diferentes tipos de espacios y decoraciones? Veamos algunos aspectos importantes sobre ello.
- Amplitud. Suelen asociarse a tranquilidad y descanso.
- Complejidad. Nos transmite una sensación de desafío y reto, lo que puede resultar atrayente.
- Coherencia. A medida que el espacio y los objetos sean más homogéneos se experimentará una sensación agradable y de comodidad.
- Textura. Cuanto más suave, mayor es la sensación de agrado. No obstante, no solo ocurre a nivel de tacto, sino también con el resto de sentidos.
- Identificabilidad. Si un objeto o un rincón determinado resulta fácilmente identificable, la sensación que nos transmitirá será agradable. En caso contrario, puede generarnos tensión e intranquilidad hasta que descifremos su significado.
- Color. Cada color está asociado a un registro de emociones determinado. Por ejemplo, el negro suele estar asociado al pesimismo y la agresividad; el blanco a la pureza; el amarillo con la felicidad y el verde con sentimientos de armonía, esperanza y paz.
- Social. Los espacios también son para compartir, de hecho hay determinados espacios que están diseñador con ese fin. Por esta razón, en ocasiones solemos buscar espacios que nos resulten óptimos para realizar actividades con los demás.
- Temperatura. Se trata de la sensación térmica asociada a los espacios. Nos resultará más cómodo o no, según nos agrade más el frío o el calor.
Para finalizar, no olvidemos que en un espacio, cada detalle es importante porque de alguna manera invita a recordar, despierta emociones y favorece diferentes sensaciones.
En nuestros trabajos intentamos siempre enfocar la reforma hacia ambientes cálidos y luminosos que transmitan bien estar, queremos que nuestros clientes estén A GUSTO en su casa.